Seguro estás aquí porque pasaste tu infancia en los años 80, una época que todos recordamos con un poco de nostalgia, canciones, tardes con amigos comiendo helados y tocando la guitarra a la luz de la luna. Pero, ¿recuerdas cómo viajábamos en los años 80? Sin duda fue la época dorada de los viajes por carretera.

En nuestra familia era muy común que nuestro padre llevara el coche al taller unos días antes de emprender el viaje y ponía a punto el vehículo, prestando especialmente a los neumáticos en Leganés, donde vivíamos.

Fue un gran momento en la carretera

Aunque ahora viajar por carretera es casi una moda, antes utilizábamos más el coche para el día a día. No todo el mundo podía permitirse un billete de avión y quizá recuerde un viaje interminable al mar, a las playas menos concurridas del norte.

Un viaje familiar que se hacía sin GPS, con un casete insertado en la radio del coche y un gran mapa desplegado en el regazo del copiloto. En aquella época desviarse del camino era muy común, perderse estaba a la orden del día, en esa época todos teníamos menos miedo a salir de aventuras, simplemente porque era casi normal hacerlo.

¿Viajar sólo un fin de semana? Algo inconcebible

La idea de irse de fin de semana no era tan común. Los viajes eran más largos, simplemente porque se tardaba más en llegar a los distintos destinos y no teníamos ni idea de cuánto se podrían haber acortado las distancias.

Los viajes eran de al menos una semana, si no dos seguidas, todo era menos frenético, más expandido…

Billetes low cost… ¿Perdón?

Los viajes de avión low cost que compramos hoy, sin pensarlo mucho en los años 80, no existían en absoluto. Viajabamos en coche, en tren, pero volar estaba fuera del alcance de mucha gente en aquella época.

No había vuelos de París o Roma por 100€, ni muy buenas ofertas a Estados Unidos.

Reservas insitu

Las agencias de reserva de alojamiento online no existían, Internet llegó a España de manera popular en los avanzados años 90, pero nunca pensamos que un día organizaríamos nuestros viajes en línea y con unos pocos clics.

Fotos de viaje

¿Cómo podemos olvidar la importancia del momento posterior al viaje? Cuando toda la familia, con amigos y parientes, se reúne en el salón para ver las fotos de las últimas vacaciones o incluso las diapositivas proyectadas en la pared. Algo que ahora ya no experimentamos y casi olvidamos las risas, al ver las fotos hechas por error porque, en su momento, no se podían borrar. Porque todavía no había herramientas de edición de fotos ni redes sociales.