El 7 de octubre de 1983 se estrenó en España, obviamente por TVE, una de las teleseries más recordadas de la primera mitad de los ochenta, “Anillos de oro”. Estaba dirigida por el genial Pedro Masó y contaba con el guión de otra de las grandes actrices de la pequeña pantalla de aquella década, Ana Diosdado, quien también tenía su papel protagonista junto a otro peso pesado, el actor Imanol Arias.

La serie se rodó poco después de que en España se hiciesen varios cambios en el propio Código Civil, donde uno de los más destacados fue la introducción de la figura del divorcio a nivel legislativo, o sea, en pleno proceso de cambio aún.

Esta serie pretendía ser, y lo fue con gran dignidad, un reflejo de la realidad social que se vivió en España durante los primeros años de los ochenta, donde se estaba olvidando poco a poco el mal sabor de boca dejado por la dictadura apenas ocho años atrás. En la serie pudimos ver cómo se trataban de forma superficial, a veces, temas como el adulterio, la homosexualidad o el aborto, algo en que no se podía profundizar mucho, dada la antigua conciencia social que aún prevalecía en España.

Ana Diosdado e Inmanuel Arias

Los trece capítulos, de cincuenta minutos de duración cada uno, nos contaban la vida de Lola, una abogada de cierta edad, que retoma su carrera profesional después de haber estado apartada varios años para cuidar principalmente a sus hijos. Decide asociarse con Ramón, el mejor amigo de su marido Enrique y se especializan en causas matrimoniales.

Ambos alquilan un piso en el centro de Madrid para poder llevar mejor su trabajo y este lugar será el escenario principal de la serie donde veremos diferentes casos de divorcio, maltratos y diferentes situaciones dramáticas con las que muchos telespectadores de aquella época se sintieron identificados.

Poco tiempo después el marido de Lola fallecía y Ramón decide continuar su vida en Nueva York, pero cuando éste regresa comienza una relación con Lola, que no solo se centraba en lo profesional.

Fue una serie sin ambiciones pero que fue muy efectiva y hoy en día es una de las más recordadas de la parrilla televisiva española. Y es que a veces, las ideas más sencillas son las que más éxito tienen. ¿Y vosotros la recordáis?