¿Quién no recuerda las famosas leyendas urbanas que tantas veces escuchamos en los ochenta? Seguro que no sois pocos los que habéis escuchado en diferentes ocasiones las múltiples leyendas urbanas que tuvieron su apogeo en nuestra década favorita y que han ido cambiando a medida que ha ido pasando el tiempo.

Con la globalización e Internet, estas leyendas urbanas, también conocidas como hoaxes en inglés, se han ido extendiendo como la pólvora, y como siempre que ocurre con un bulo, desde que sale hasta la última persona que la cuenta, la historia ha cambiado por completo y todos han añadido algo a la misma y casualmente siempre conocemos a alguien que a su vez conoce a alguien que ha pasado por una situación parecida para hacerla más verosímil.

Una de las leyendas urbanas más conocidas y de las que hablé brevemente en otro post dedicado a esta clase de sucesos es la de la autoestopista o la de la chica de la curva, un relato que se originó sabe Dios donde pero que circula de un lado para otro con el paso de los años.

¿Os habéis cruzado alguna vez con ella?

Mucha gente asegura haber visto a una chica haciendo autostop cerca de una curva donde apenas hay luz, ésta va vestida con un traje blanco, por norma general y se dice de gente que la ha subido al coche y posteriormente éstos ven como desaparece sin explicación aparente estando el vehículo en marcha.

La leyenda habla sobre una chica con un vestido blanco hecho jirones que está haciendo autostop y siempre ocurre de noche. Unos dicen que se aparece a los conductores para avisar que hay una curva muy cerrada un poco más adelante y que tengan cuidado y otras veces causa, o se dice que causa tal asombro entre los conductores que no se dan cuenta de la señalización y se estrellan en el mismo lugar en el que lo hizo esta chica.

¿Alguno de vosotros ha visto a esta mujer? Seguro que no será la primera ni última vez que escuchéis alguna leyenda urbana y tampoco será la última que rescataré del acervo popular de los ochenta y aparezca aquí, en nostalgia80.com