1988, año de lanzamiento de Wells & Fargo, un título que llegaba desde Topo Soft y con el que tuvo bastante éxito gracias a este western que con gráficos bastante decentes aún para estar a finales de los ochenta y que enganchó a muchos jugadores de aquella dorada época de los videojuegos en España.

La compañía de diligencias Wells & Fargo intentaba abrir una línea de comunicación entre la zona Este del país y la zona Oeste pero las tentativas habían quedado en agua de borrajas a causa de los continuos ataque por parte de cuatreros, indios, pistoleros y demás gente de mal vivir, los cuales habían acabado con el sueño de los propietarios de la compañía.

Pero se empecinaron y terminaron por hacerse con los servicios de dos pistoleros que en otro tiempo estuvieron fuera de la ley, para que fuesen ellos los que llevasen la diligencia sana y salva a su destino, algo que no sería para nada una empresa fácil.

Aspecto del juego en el Amstrad

El objetivo del juego era en un principio sencillo, hacer llegar a la dichosa diligencia hasta Valdecañas City y de esta forma abrir una línea de comunicación entre una zona y otra del país repleta de peligros que en ocasiones nos podrán de mal humor dado que a veces la dificultad se dispara.

Para llevar a cabo nuestra misión teníamos que atravesar cuatro territorios infestados de lo peor de lo peor del Far West, esperando a un fallo para hacerse con nuestro botín, la diligencia y darnos cuatro tiros como el que no quiere la cosa.

Aquí tendríamos que poner a prueba nuestra pericia con las armas, escondernos tras arbustos, agacharnos tras las rocas o escapando de quien nos persiga a caballo. ¿Alguno llegó a acabarse este juego?