Los superhéroes llevan con nosotros muchísimo tiempo y dado que muchos de ellos y sus aventuras han permanecido casi latentes durante décadas, con esta entrada quiero dar inicio a una saga de post que dedicaremos a los superhéroes que nos acompañaron durante nuestra infancia, aunque hayan nacido muchos años antes de la década de los ochenta, pero que gracias a los quioscos de intercambio de tebeos que había anteriormente y a las ediciones de algunas compañías, fuimos muchos los que pudimos volver a disfrutar de las aventuras de estos personajes de ficción que nos hicieron sentirnos especiales y a los que nos hubiera gustado parecer cuando éramos unos niños y niñas.

A mí, que siempre fui un poco retorcido para muchas cosas… nunca me gustaron los superhéroes más famosos como Superman, Spiderman, Hulk, 4 Fantásticos y demás, siempre intenté buscar un poco más allá y me gustaban mucho los cómics de El Motorista Fantasma o el personaje del que voy a hablar a continuación Namor, personaje creado por el genial Bill Everett.

Era un personaje completamente atípico a lo que estábamos acostumbrados a ver en los cómics de Marvel o DC por ejemplo, no vivía en ninguna ciudad ni trabajaba de periodista o científico. Namor hera hijo de Leonard McKenzie, capitán de un rompehielos americano y de la princesa Fen, del continente de la Atlántida.

Figura del conocido personaje de Marvel

Gracias a sus padres heredó lo mejor de cada mundo, contaba con piel blanca como los humanos al contrario que los atlantes que la tenían azul, podía respirar tanto bajo el agua como fuera de ella, aunque cuanto más tiempo pasase fuera de su elemento sus fuerzas se iban debilitando, otro de sus rasgos físicos importantes eran sus orejas de punta, tal como si fuese un elfo.

Además contaba con unas pequeñas alas que le salían de los tobillos, lo que le permitían volar fuera del agua y alcanzar velocidades increíbles hasta en lo más profundo de los océanos. La verdad es que con estas características consiguió engancharme a sus aventuras, aunque el hecho de que siempre me gustó este superhéroe es porque puede que sea el primer libro con 10 de sus aventuras que me regalaron de este estilo, no lo sé, pero hoy he querido compartir con vosotros este pequeño retazo de mis recuerdos sobre esos personajes que tantas buenas horas nos hicieron pasar cuando éramos más jóvenes.