Comenzamos otra entrega más sobre la carrera deportiva de Larry Bird quien con su llegada sumada a la de Magic Johnson a la NBA fue toda una revolución, haciendo que las bajas audiencias que estaba cosechando en las televisiones subieran como la espuma y haciendo que cientos de miles de personas se pusieran de nuevo frente a los televisores para ver la rivalidad deportiva que había entre ambos, algo que ya venía desde la época universitaria.

Hay que destacar que aunque tenían rivalidad desde hace muchos años, durante sus carreras deportivas tan solo llegaron a enfrentarse en tres finales más, pero aún así verles jugar era una verdadera delicia y lo mejor de todo, eran caballeros tanto dentro como fuera de la cancha.

Comenzaban las series finales de 1984 con dos partidos en el Boston Garden donde los Celtics y los Lakers se repartieron una victoria cada uno y posteriormente los bostonianos recibirían una soberana paliza cayendo ante los Lakers. Posteriormente en una entrevista ofrecida a Bird, llamó a sus compañeros “sissies”, más o menos amanerados, por no haber combatido con más garra contra los angelinos.

Uno de los momentos de la final de la NBA de 1984

Llegaba el cuarto partido y los Celtics tenían la mentalidad de que con la actuación del tercero no iban a ninguna parte y salieron dispuestos a darlo todo por la victoria, pero la atención se centraba fuera de la cancha donde Magic Johnson estaba discutiendo de una manera muy acalorada con el señor Carr, (creo que utillero local) y por otra parte K.C. Jones recibe una falta técnica por parte del árbitro del partido por protestar.

No podía ir a peor, todo comenzaba a salirse de madre y la olla estaba a punto de estallar por la presión, pero a la gente le gustó aquello y el share televisivo subió como la espuma, pero aquello no era nada comparado con lo que estaba por venir y de lo que nos enteraremos en la siguiente entrega de la carrera deportiva de Larry Bird.