ben-johnson

El mundo del deporte siempre ha estado repleto de gestas, pero también de muchos tramposos. En este artículo quiero hablaros de estos últimos, sobre todo de los que hicieron de las suyas en los ochenta. ¿Os acordáis de los tramposos en el deporte? Seguro que se os viene más de uno a la cabeza.

Ben Johnson, el rey de las trampas en el deporte

Uno de los atletas más famosos de los ochenta fue el canadiense Ben Johnson. Era el único que podía hacerle competencia a Carl Lewis, el hijo del viento. En 1987 batió el récord del mundo de los 100 metros lisos en los Campeonatos del Mundo de Roma. En 1988, durante las Olimpiadas de Seúl 88 compitió contra Lewis y le ganó en la final con 9,79s.

Tres días después de conseguir el título olímpico le sería desposeído por dopaje. Admitió haberse dopado desde 1981 y le fueron retirados todos los títulos. En 1993 dio positivo de nuevo en una carrera en Canadá y fue suspendido de por vida.

En 1980 se produjo un caso inesperado, una atleta ganó el maratón de Boston tras haber montado en metro. Dado que por aquellos años no había tal despliegue de cámaras como hoy en día, fue su mejor jugada. Esto lo haría en la maratón de Nueva York, pero finalmente la descubrieron y la desposeyeron de los títulos.

Un boxeador super duro

En el año 1983 el preparador de boxeo Panama Lewis modificó los guantes de su pupilo Luis Resto. Retiró el material blando de los guantes y en su lugar colocó yeso. Resto, que aunque era buen púgil no tenía nada que hacer contra Billy Collins Jr. le dejó KO.

Le propinó semejante paliza que nadie se creyó su victoria. La cara de Collins estaba completamente hinchada, algo muy poco normal en los combates de Luis Resto. Finalmente se descubrió, pero Collins falleció nueve meses después, sin saberlo.

la-mano-de-dios

Maradona y la mano de Dios

En el año 1986 se celebró el Mundial de México de Fútbol. En los cuartos de final se enfrentaban Argentina contra Inglaterra y Diego Armando Maradona hizo una jugada muy recordada. Marcó un gol con la mano ante la salida del portero a lo que el árbitro lo dio como válido. Este gol contribuyó a la victoria de los albicelestes en este mundial. La jugada se conoció como “La mano de Dios”

En el año 1985 el golfista británico David Robertson también hizo de las suyas en el Open Británico. Lo que hacía era adelantarse a sus compañeros para llegar antes que ellos al green. De esta forma podía acercar su bola más cerca del hoyo y tener más oportunidades de embocar.

Después de 14 hoyos, el resto de golfistas comenzó a desconfiar y se quejaron al árbitro, quien determinó que había hecho trampa. Fue inhabilitado durante 30 años para participar en el circuito profesional y multado con 20.000 libras.

Estos son tan solo algunos de los muchos ejemplos de tramposos dentro del mundo del deporte durante la década de los años ochenta, ¿recuerdas a alguno de ellos?