Hoy nos vamos al año 1988 para recordar una novela que tuvo cierto éxito entre el público infantil y juvenil. Su título es Matilda y es un libro escrito por Roald Dahl, quien disfrutó de su momento de fama gracias a la buena aceptación de esta publicación pero también por su posterior adaptación al cine en 1996 e incluso con su musical en 2010.

El libro trata sobre Matilda Wormwood, una niña tremendamente inteligente y sin llegar a los cinco años, ya había conseguido leer muchos libros, consiguiendo acumular infinidad de conocimientos sobre muchas materias. Sus padres no se preocupan por ella y no le quieren comprar libros, que es lo que ella de sea, únicamente le dicen que vea la televisión.

Poco a poco, Matilda se va dando cuenta de que es mucho más inteligente que sus padres y no les hace caso. Cuando ellos están fuera, no duda en escaparse a la biblioteca para leer y leer, de forma que cuando comienza el colegio aventaja muchísimo a sus compañeros, por lo que su profesora pide a la directora que la pasen a una clase avanzada, pero la directora se niega.

Portada del libro

Para no desvelaros mucho más sobre la historia, os diré que Matilda descubre un día que cuenta con poderes telequinéticos, algo que únicamente confía a su profesora, entre las que nacerá una gran amistad y donde descubrirá que su querida profesora vive prácticamente en la pobreza porque la obligan a pagar prácticamente todo su sueldo por algo muy injusto.

Intentando no hacer un spoiler sobre este original y entretenido libro, os he hecho como Mayra Gómez Kemp, “hasta aquí puedo leer”. Recuerdo que este libro comencé a leerlo pero no lo llegué a acabar; posiblemente lo busque, me haga con él y acabe algo que tengo pendiente desde hace muchos años.