En las últimas décadas uno de los mejores regalos que se podía hacer de padres a hijos era un ciclomotor cuando éste hubiera aprobado unos importantes exámenes, la EGB o cualquier otro caso. Aunque hace bastantes años un ciclomotor era algo prohibitivo, a finales de los ochenta las cosas iban cambiando y seguro que muchos de vosotros tuvisteis esa suerte o conocisteis a alguien cuyos familiares le regalaron un ciclomotor.

Durante la década de los ochenta, por lo menos en España, dominaban varias clases de motos, las de ciudad como Vespino o Derbi Variant y las de cross como las Puch entre muchas otras marcas. Estas eran algunas de las más famosas que se veían de forma muy común en las calles de nuestras ciudades, pero también había otras marcas, menos famosas y más baratas, pero no por ello demasiado malas.

Hoy nos vamos al año 1987, donde recordamos un ciclomotor que no tenía una marca tan conocida como las anteriormente citadas, G.A.C., marca que también fabricaba bicicletas, cosa que seguro que no ocurriría con Honda, Suzuki o muchas otras marcas que llevan tiempo entre nosotros. Así era el anuncio en prensa de aquellos años:

Así era el anuncio de la G.A.C Onix

“Deja atrás los viejos líderes. G.A.C Onix. Nuevo carenado muy sólido de bello diseño, con un completo cuadro de instrumentación. Nuevo sistema de barra de bloqueo en rueda trasera. Nueva llave de luces larga y corta con paro automática y claxon. Nuevo asiento de dos alturas abatible con cofre interior porta documentos”.

Así era la publicidad de este ciclomotor, haciendo referencia indirectamente a las marcas predominantes y ofreciendo un montón de supuestas novedades, pero… todo lo que ofrecía lo tenían sus competidoras y además el modelo Onix, era prácticamente igual que el de la Derbi Variant, por poner un ejemplo. ¿Recordáis este ciclomotor?