Hoy volvemos al mundo del cine donde vamos a recordar (o seguramente a dar a conocer a más de uno) una de las películas menos conocidas de Sean Connery, un actor que ha estado encasillado en un mismo rol después de haber interpretado en varias ocasiones al agente secreto más famoso de la historia, 007.

En este caso, Sean Connery protagoniza un largometraje de ciencia ficción, que bien podría considerarse como un remake de uno de los clásicos del western, “Sólo ante el peligro” pero en versión espacial.

Esta película de 1981 estaba dirigida por Peter Hyams y además de estar protagonizada por el actor escocés, contaba también con la banda sonora creada por uno de los grandes de Hollywood, Jerry Goldsmith

Cartel original de la película

Connery encarna a William O’Neil, un policía “galáctico” que es destinado a una de las lunas de Júpiter, Io. Durante ese destino, su esposa le abandona y se lleva a la Tierra a su hijo, hecho que cambiará su vida totalmente. En plena crisis, descubre que los mineros que están trabajando en el yacimiento de su destino están comenzando a morir en extrañas circunstancias y haciendo algo incomprensible y que escapa a las normas de seguridad de la empresa, como salir al espacio sin los trajes protectores o manteniendo incluso conductas muy agresivas y peligrosas.

Junto a la doctora Lazarus, O’Neil comienza su investigación para saber qué es lo que está ocurriendo, hasta que las pistas le llevan a que los trabajadores están ingiriendo un extraño elemento que aumenta exageradamente su capacidad laboral, pero que ataca directa y negativamente a sus cerebros. Además descubre que la empresa que está explotando la colonia es quien suministra esa sustancia, hecho que hará que se enfrente al jefe de dicha corporación, quien no dudará en contratar a dos esbirros para acabar con O’Neil.

Sean Connery en una de las escenas de la película

A partir de aquí comienza una aventura donde una historia paralela, la de sus asesinos y la de los mineros, hará que permanezcamos en nuestros asientos hasta el final del metraje, que desgraciadamente no tuvo un gran éxito pero que es bastante recomendable si queremos pasar un buen rato recordando esas películas de los ochenta dedicadas a la ciencia ficción que tan de moda estaban y que eran tan características.

¿Realmente alguno de vosotros se acuerda de esta película? Posiblemente si, pero os aseguro que la próxima vez que hable de cine y exactamente de Sean Connery os traeré una auténtica joya que no mucha gente conoce de este estupendo actor.