En 1985 el genial Martin Scorsesse dirigía una estupenda película titulada en origen “After Hours” y que en España se conoció como: “¡Jo, qué noche!” una película que algunos clasifican como de culto, otros como de una obra menor e incluso como un divertimento del propio director, quien lleva a cabo su película, a mi modo de ver, más gamberra y fresca de todas las que ha realizado hasta ahora.

En este metraje protagonizado por Griffin Dune y Rosanna Arquette y donde el propio Scorsesse tiene un pequeño cameo, el director nos sumergirá en el barrio de los artistas de la Gran Manzana, el Soho de Nueva York, con una película de lo más divertido y que nos hará pasar un buen rato.

Griffin Dune daba vida a Paul

La trama se centra sobre Paul, un atractivo joven que pierde el último metro de la noche cuando regresaba a casa y aquí es donde comienza la aventura del protagonista y todo aquel que le rodea, de una manera fascinante, divertida y peligrosa a la vez. Paul conocerá algunos de los entresijos y lugares más sórdidos y bizarros de la ciudad entre situaciones de verdadera comedia y otras con cierto sentimiento.

Haga lo que haga Paul para llegar a casa siempre tiene el mismo final, acaba metiéndose en un lío tras meter la pata una y otra vez y acaba siendo perseguido por una fauna de personajes tan dispares como peligrosos y la verdad es que todo le sale mal y es un verdadero gafe. ¿Cómo conseguirá llegar a casa sano y salvo? Merece la pena descubrirlo por vosotros mismos.

Una de las escenas de la película

La verdad es que el mundo está completamente loco pero a veces uno tiene un día que sería mejor haberse quedado en casa, pero claro, eso no se puede predecir y al final pasa lo que pasa y nos encontraremos lo que puede ocurrir en esta entretenida película.

También son destacables los papeles de Teri Garr y una joven Linda Fiorentino, pero la que más destaca es Rosanna Arquette aunque no sale demasiado tiempo, pero el poco que lo hace, lo borda. Sin duda alguna, un metraje ideal para ver a cualquier hora.