En el año 1982 se estrenaba, como siempre en Estados Unidos, una serie titulada The Powers of Matthew Star, una serie de ciencia-ficción y aventura. Estaba protagonizada por el joven Peter Barton y uno de los clásicos secundarios de los ochenta y noventa, Louis Gosset Jr., actor de películas como Águila de acero y secuelas o de director de instituto en alguna serie que apenas recuerdo.

La serie trataba sobre un chico que llegaba a nuestro planeta procedente del espacio y que adopta el nombre de Mathew Star. Debió gustarle tanto la tierra que comenzó a estudiar en un instituto como cualquier otro chico. Pero éste no venía solo, llegó a la tierra acompañado de su guardián, Wal Shepard, quien casualmente también va al instituto, pero no como alumno, sino como profesor.

¿Por qué vinieron estos dos a la Tierra? Pues en su planeta Quadris, la población se hartó del poder y derrocaron al líder, el padre de Matthew Star, y por ello tuvo que huir con su mentor para que tomase conciencia de todos sus poderes, muchos de ellos desconocidos para él como la telepatía y la telequinesia.

Una de las escenas de la serie

Hasta aquí más o menos bien, aunque la trama bastante trillada, pero ahora llega lo más rimbombante. Supuestamente, cuando Matthew hubiera madurado y descubierto sus poderes volvería a su planeta de origen para reclamar el trono de su padre pero los servicios de inteligencia de los Estados Unidos estaban al tanto de ello y decidieron contratarlo.

De esta forma se da un cambio radical a la serie, tanto que al público no le acabó de convencer y finalmente fue cancelada al terminar la primera temporada. Todo un churro de serie que tenía bastantes pretensiones y de hecho la publicación TV Guide llegó a clasificarla en la posición número 22 en la lista de los 50 peores programas de la historia de la televisión norteamericana. No me extraña.