A finales de los setenta se lanzaba un juego verdaderamente inusual para la época en la que vivimos y donde los juegos de mesa apenas tienen cabida en las habitaciones de los niños de ahora y no solo era inusual para ahora sino para finales de los setenta y principios de los ochenta.

Pero hay que decir que este juego de mesa era bastante original, se llamaba “Paseo por la ciudad” y llegaba a las mejores jugueterías desde la conocida compañía juguetera Educa. Su principal objetivo era, además de ser algo ameno, enseñar las señales de tráfico y las normas de circulación, eso sí muy básico todo.

El juego contaba con una ruleta y unos cartones que tenían diferentes escenas de tráfico impresas donde el protagonista principal, nosotros, íbamos en bicicleta. En la ruleta encontrábamos dos círculos y en cada uno se alojaban diferentes figuras de cartón en forma de vehículos y señales.

Una de las tarjetas del juego

Cuando se jugaba se tenía que tomar un cartón del montón y se giraba la ruleta, si el cartón tenía un círculo azul debía seleccionarse un vehículo de la ruleta y si era un círculo amarillo debía seleccionarse una señal. Después se ponía el vehículo o señal sobre el cartón en su lugar y se hacía la pregunta correspondiente.

Todos los jugadores seleccionaban las fichas de SI o NO según estimaban que fuera la respuesta correcta y si acertaban el cartón en forma de estrella era de ellos y ya tenían un punto. Obviamente el que tenía más puntos al final de la partida era el que ganaba.

¿Quién recuerda este juego?