Cuando ya llevábamos cierto tiempo teniendo nuestros primeros contactos con las videoconsolas durante toda la década de los ochenta, en el año 1989 se lanzó una consola portátil que revolucionó todos los sistemas habidos hasta aquel momento y con el que la compañía nipona Nintendo tuvo unos beneficios brutales dado que todo el mundo quería aquella fantástica maquinita para ir por ahí a cualquier lado para jugar como en casa a sus títulos favoritos.

La Nintendo Game Boy fue lanzada casi a las puertas de 1990, coincidiendo con el cambio de década y sobreviviendo a ella con diferentes actualizaciones, versiones e incluyendo adelantos como el color, pero eso ya pertenece a otra época y hoy hablamos de la que se lanzó originalmente.

Su primer año no fue realmente como esperaban en cuanto a ventas pero gracias a un juego del que ya hablamos hace tiempo en nostalgia80.com, el Tetris, y por el estupendo trabajo de los conversores de la compañía nipona además de para otras compañías de gran renombre en el panorama del videojuego, sus ventas se dispararon como nunca hubieran pensado.

Diseño de la Game Boy Original

Hay que destacar que se vendieron casi 120 millones de consolas de esta clase (incluyendo también la Game Boy Color de 1998) convirtiéndose en una de las videoconsolas más rentables para esta compañía que hoy no está en su mejor momento y desde los ochenta no entraba en números rojos como arrojaron sus resultados el pasado trimestre.

En sus inicios fue conocida como Dot Matrix Game (DMG) aunque finalmente y para tener un nombre que todo el mundo pudiera recordar y fuese más comercial, optaron por la Game Boy, con la que millones de personas en todo el mundo pasaron muy buenos momentos con este dispositivo.