En nuestra entrada diaria vamos a regresar al mundo de la literatura con una novela publicada en 1980 en nuestro país y de la cual hubo una edición, la primera, en el año 1979, por ello me he permitido la licencia de arrancar esta estupenda novela para trasladarla a nuestra década y compartirla con todos vosotros, aunque la edición en España fue en 1980.

Se titula Los renglones torcidos de Dios y es una novela de Torcuato Luca de Tena donde se nos cuenta la historia de Alice Gould, una detective privado que se interna en un hospital psiquiátrico siguiendo las pistas de un caso de homicidio y donde descubrirá algo que no se esperaba.

Hay que destacar que para saber bien de qué hablaba, el autor se internó durante casi tres semanas en una institución psiquiátrica donde pudo convivir con enfermos mentales, quienes le sirvieron como base para poder ir creando los diferentes personajes de la obra y gracias a esa experiencia pudo realizar una interesante dedicatoria del libro.

Portada de una de las ediciones de Los renglones torcidos de Dios

Esta dedicatoria dice así: “Los renglones torcidos de Dios son, en verdad, muy torcidos. Unos hombres y unas mujeres ejemplares, tenaces y hasta heroicos, pretenden enderezarlos. A veces lo consiguen. La profunda admiración que me produjo su labor durante mi estadía voluntaria en un hospital psiquiátrico acreció la gratitud y el respeto que siempre experimenté por la clase médica”.

De aquí que dedique estas páginas a los médicos, a los enfermeros y enfermeras, a los vigilantes, cuidadores y demás profesionales que emplean sus vidas en el noble y esforzado servicio de los más desventurados errores de la Naturaleza”.

Hay que decir de este libro que se hizo una versión para la gran pantalla en México, allá por 1983, la cual estuvo dirigida por Tulio Demicheli y protagonizada por actores mexicanos como Lucía Méndez como Alice Gould, Mónica Prado, Manuel Ojeda, Gonzalo Vega y Alejandro Camacho entre otros.

Una novela que llama mucho la atención porque además de la trama principal del homicidio hay una historia paralela donde se conoce la cara menos visible de una institución de esta clase.