En verano y desde hace mucho tiempo, los helados son uno de los alimentos o chuchería (se llame como se llame) preferidos por todo el mundo desde los más grandes a los más pequeños y lo cierto es que están realmente deliciosos aunque seguro que muchos de vosotros echa de menos aquellos helados de nuestra década favorita.

Se algunos de ellos ya hemos hablado aquí en nostalgia80.com como es el caso del Frigopie, Drácula o el Colajet, unos de los más famosos y de los que seguro que más de uno y de una de los que seguís a diario este blog recordáis con cierta nostalgia.

Otros muy conocidos eran el Frigurón, de la casa Frigo, helado que tenía forma de tiburón y un color azul que resultaba verdaderamente tentador. Twister, un divertido helado de tres sabores, uno central de color azul y otros dos rodeándolo en espiral de colores rojo y verde, de sabores que no recuerdo exactamente.

¿No se os hacía la boca agua con tanto helado?

Años después aparecería el Twister choc con chocolate blanco y negro con corazón de chocolate un poco más duro. El Negrito era uno de los helados de cucurucho por excelencia, con una galleta crujiente (cuando no llevaba demasiado en la nevera y era como un cartón mojado) y un delicioso helado de nata y fresa o vainilla y chocolate recubiertos por una capa de chocolate con almendras picadas.

También destacaba el que más me gustaba, el Super Choc, centro de chocolate duro recubierto de chocolate blandito y cremoso y todo ello bañado en una crujiente capa de almendras y chocolate duro. El Calippo era el helado de hielo por excelencia después de los polos que eran muy baratos. Consistía en una especie de cilindro de cartón, aplastado por una esquina y dentro llevaba el cilindro de hielo del sabor elegido y para hacer que éste subiera cuando se iba gastando debíamos aplastar una de las partes del cartón.

A ello también podríamos sumarle los helados de corte, que siempre vi a personas mayores comiéndolo y una larga retahíla de helados que hoy en día ya no están con nosotros pero que forman parte de nuestra memoria colectiva.