Hoy en día todo ha cambiado con la tecnología, prácticamente se puede hacer de todo a través de Internet, con un ordenador o un smartphone. Tanta tecnología ha hecho que se perdieran muchas de las características que nos acompañaron durante años, como por ejemplo ligar.
¿Te acuerdas cómo era ligar en los ochenta? Seguro que habrás escrito muchas cartas a alguien que te gusta, con la típica hoja de libreta cuadriculada. En ella te esmerabas en hacer tu mejor letra y usar las mejores palabras e incluso las acompañabas con unas gotas de colonia. Todo eso se ha cambiado por mensajes en WhatsApp, redes sociales o SMS para los más clásicos.
En los 80 no existían las redes sociales
Hablando de redes sociales, antes no existían. Por ello no se podía espiar el perfil de la persona que nos gustaba y teníamos que utilizar otros recursos. Una idea era intentar saber cosas de ese chico o chica gracias a su mejor amigo, confiando en que no le dijera nada. También podíamos enviar cartas anónimas o armarnos de valor e ir directos, presentarnos y esperar a tener suerte.
Gracias a que las comunicaciones eran boca a boca, no se podían malinterpretar los mensajes enviados. Lo más importante debía ser dicho a la cara y en el caso de las personas más tímidas, por carta o mediante los amigos. ¿Quién no tuvo un amigo o amiga a quien confesar nuestros amoríos?
No había teléfonos móviles
Tanto desde casa como en las cabinas de teléfono, las llamadas eran algo indispensable y si podía ser todos los días mucho mejor. Era la única forma de estar en contacto con la persona que nos gustaba cuando no podíamos estar juntos.
Llamar por teléfono era la mejor forma de planear una cita, con lo que se podían preparar con mucho tiempo de antelación. Era el mejor recurso si solo nos podíamos ver con esa persona tan especial durante solo un día.
La paga del fin de semana
A todos nos daban la paga para el fin de semana, a algunos más y a otros menos, 100, 200, 500 pesetas era suficiente como para disfrutar de una tarde fantástica. Tomar algo en el disco bar de moda con los amigos, iral cine o poniéndonos a tono para perder la vergüenza y ligar en la discoteca. ¿No echáis de menos aquellos años?
Intentábamos ligar con una cinta de cassette
Seguro que tú también pasaste mucho tiempo grabando las canciones de moda y más románticas del momento. Siempre tenías una cassette preparada para darle al REC. Si eras muy ingenioso también podías grabar tu voz tanto al principio como al final de la cinta y dedicársela. ¡Era lo más!
La foto de carnet era imprescindible
Los selfies no existían en aquellos años. Por ello, siempre había que llevar una foto de tamaño carnet en la cartera, para dársela. De esta forma siempre podíamos estar más cerca de aquella persona que tanto nos gustaba.
¿Cómo era tu forma de ligar en los ochenta?
A veces la nostalgia nos ciega y nos produce amnesia selectiva, en los 80 era más difícil ligar.
El artículo no dice que sea más fácil ahora… sino que era mejor antes… que es diferente.