¿Alguna de vosotras se acuerda de Puck? Seguro que sí. Y digo alguna, porque Puck era una publicación para chicas que aunque tuvo sus orígenes en el año 1952 en Dinamarca, sobrevivió hasta la llegada de la década de los noventa, por lo que inexcusablemente también pasó por nuestra década favorita.

Esta publicación nos narraba las aventuras de Bente Winther, una joven danesa que vivía en un internado dado que era huérfana de madre y su padre, por causas laborales, no podía hacerse cargo de ella; ingredientes ideales para el desarrollo de la trama que apasionó a muchas jovencitas de diferentes generaciones.

La temática tenía el trasfondo de las relaciones entre los protagonistas, su entorno y las diferentes situaciones que se dan en diferentes momentos de la adolescencia, por lo que muchas chicas siguieron los consejos y andanzas de este aleccionador personaje que hoy ocupa estas líneas.

Seguro que os acordáis de estos libros tras ver la fotografía

Hay que destacar que cada publicación, a pesar de no tener más de 175 páginas normalmente, sumergía a quien lo leyese en aventuras misteriosas que finalmente acaban ser resueltas por la protagonista, o enredos amorosos o algún que otro problema de la adolescencia. Ahí radicaba el éxito de esta publicación, en el que muchas jóvenes se sentían identificadas con este personaje creado por la escritora Lisbeth Werner.

Otra curiosidad de esta clase de libros es que la protagonista iba creciendo a medida que las entregas se iban lanzando, es decir, que en la primera edición era una niña y entrega a entrega iba convirtiéndose en una adolescente, con todas las cosas buenas y malas que ello acarrea.

¿Quién de vosotras no la recuerda aunque sólo sea de pasada?