En el mundo de la publicidad son muchos los productos que hemos podido ver en los diferentes medios de comunicación y soportes que tenemos al alcance de nuestra mano, pero… ¿habéis visto alguna vez una estación de tren que se publicitase? Pues si no es así, ahora podréis haceros eco de un anuncio que aparecía en la prensa el 21 de diciembre de 1982 con la principal estación de Barcelona, la Estación de Sants.

En Sants está la estación que Barcelona necesita. Un nuevo concepto de estación: moderna, amplia, cómoda… con una serie de instalaciones y servicios que predisponen al viajero para un buen viaje. Fuera, aparcamiento, paradas de taxis y de autobuses”.

Dentro, en su amplio hall de 20.000 metros cuadrados, aire acondicionado, facturación de equipajes con bandas transportadoras, 40 taquillas, venta anticipada de billetes, monitores y paneles electrónicos de información, restaurante, cafeterías, entidad bancaria y área comercial con gran variedad de tiendas”.

Así explicaban gráficamente lo que podían encontrarse en la estación de Sants

En la planta inferior, 6 andenes y 13 vías desde donde parten trenes hacia todas las direcciones. Trenes de cercanías, nacionales, internacionales y un tren especial que enlaza la Estación Central de Barcelona-Sants con el aeropuerto cada 20 minutos”.

Además, la Estación de Sants tiene conexión directa con el Metropolitano de Barcelona. Evidentemente, el tren está cambiando; está mejorando y –lógicamente- las estaciones cambian y mejoran también. Renfe, Estación Central de Barcelona. Un tren de comodidades”.

Ahí queda eso. Me llamó tanto la atención que hoy ha sido el tema que he querido compartir con vosotros en ese apartado que tanto me gusta como es el de la publicidad.