Últimamente se están dando muchas noticias relacionadas con fenómenos astronómicos como el paso de un asteroide hace escasas fechas a poco menos de 27.000 kilómetros de nuestro planeta y hoy quiero recordar otro de los acontecimientos del cielo sucedidos durante la década de los años ochenta, exactamente durante la madrugada del 9 al 10 de enero de 1982.

Era uno de los siete eclipses (cuatro parciales de Sol y tres totales de Luna) que ocurrieron en 1982 y comenzó a verse tapada por la sombra de la Tierra a las 18:13h, aunque el eclipse total no comenzó hasta llegadas las 20:15h, momento en el que la Luna empezó a “desaparecer”.

Poco a poco fue apareciendo, dando por finalizado el eclipse a las 21:34h aproximadamente, teniendo un último contacto con la sobra a las 22:37h y el último contacto con la penumbra a las 23:36h. El principio del eclipse total fue visible en Groenlandia, en toda Europa, en toda África a excepción de su zona occidental, Asia, Australia, océano Índico, regiones árticas y en el extremo noroeste de Norteamérica.

Imagen del eclipse total de luna

Según recogía la prensa de aquel entonces: “aún cuando el interés científico de los eclipses de Luna es hoy en día casi nulo, los eclipses totales son espectáculos bastante notables, sobre todo porque pueden ser observados a simple vista, claro está si las nubes lo permiten”.

Seguro que muchos de vosotros y vosotras pudisteis vivir más de un acontecimiento astronómico, aunque desde aquel año hasta nuestros días ya se han producido unos cuantos, por ello hoy recordamos este evento con todos vosotros.