En el año 1986 se estrenó la película El Nombre de la Rosa, protagonizada por Sean Connery y basada en la novela de Umberto Eco que lleva el mismo título. Hoy no hablaremos sobre la película, pero sí sobre el libro.
El Nombre de la Rosa es una novela histórica de detectives que nos sitúa en pleno siglo XIV, en un monasterio benedictino al norte de Italia, donde los monjes están terriblemente apoderados por el miedo y la incertidumbre debido a una serie de muertes misteriosas que se desencadenan en la abadía. Para resolver el misterio, el franciscano Guillermo de Barskerville se aloja en el monasterio y con ayuda de su pupilo, el joven Adso Melk (narrador en primera persona que nos contará toda la trama) se dispone a desvelar el misterio.
En esencia, este es el argumento de esta novela que tanto éxito tuvo desde su publicación en 1980, convirtiéndose pronto en un bestseller con una tirada de nada más y nada menos que ocho millones de ejemplares, pero la novela de Umberto Eco es mucho más que esto ya que su autor también nos introduce cuestiones de la filosofía y la teología medieval, que, combinado con su estilo narrativo absorbe al lector de tal modo que sea capaz de meterse en la historia y seguir la investigación con los protagonistas, paso a paso.
Si aún no has leído esta novela, en Nostalgia80 os animamos a que lo hagáis. ¿Os animáis a descubrir el motivo de los asesinatos tanto aterran a los monjes de la abadía?
«Escribí porque tuve ganas. Impulsado por una idea seminal: envenenar a un monje»
Umberto Eco, haciendo referencia al Nombre de la Rosa
Ésta es una novela muy interesante, donde el autor lleva de la mano a los lectores descubriendo los misteros de la abadía, el poder de la información y los laberintos de la majestuosa biblioteca donde se desarrolla el trama y se juega la vida por el acceso a la información. Resulta paradógico hay en día contar con toda la información dispoble por diversos medios y diversos formatos y no interesarnos en ella, vivir en la sociedad de la información desinformados y peor aún, desinteresados, desconectados en este mundo de conectividad, no sé si la información ahora aha perdido poder porque ahora todos tenemos acceso o porque es a pocos a los que les interesa conocer los misterios que se esconden entre letras. El nombre de la rosa es una obra ejemplar, los invito a descubrirla!!
Claudia
claudiamdza@gmail.com