Regresamos de nuevo a la década de los ochenta para recordar otro de los queridos juegos de mesa de la juguetera CEFA, recordamos el Cetro de Yarek, un juego que tenía un tablero muy diferente a lo que normalmente estábamos acostumbrados, era en tres dimensiones, algo que unido al ambiente en el que se recreaba el juego y que los protagonistas eran magos, daban un toque muy especial a este juego.

Podíamos ser diferentes magos, prestidigitadores o incluso escapistas y nuestra misión principal era la de viajar hasta un barco maldito repleto de zombis, espíritus y demás fauna del más allá, para conseguir hacernos con un cofre en cuyo interior se encontraba el conocido Cetro de Yarek, con el que a su poseedor se le revelaría todo el conocimiento sobre la magia, convirtiéndole en el más poderoso jamás visto.

Con esta ambientación dejábamos correr nuestra imaginación y comenzábamos a pensar lo fastuosas y apasionantes que serían las luchas para hacernos con tan preciado elemento. Primero llegábamos al barco y nuestro movimiento estaba supeditado a una ruleta, que era la que nos decía cuanto podíamos andar.

Aspecto del tablero de juego de El Centro de Yarek

En otras casillas podíamos desde avanzar o retroceder hasta perder turnos o incluso perder llaves que nos impedirían abrir el cofre final, aunque no todas eran válidas, sólo una era la verdadera. Así que había que ser cautos y tener suerte para llegar al cofre final y poder abrirlo, sino… nos podíamos dar por muertos.

La traicionera ruleta podía ayudarnos en alguna ocasión aunque cuando llegábamos a uno de los tres cruces de camino, la suerte de la ruleta podía hacer que nuestro camino hacia el cofre fuera mucho más corto o incluso podía llevarnos fuera del barco y tener que comenzar de nuevo para conseguir hacernos con el famoso cetro.

Juegos inocentes, divertidos y para disfrutar con los amigos, algo que con el tiempo se ha ido perdiendo y de lo que sólo nos quedan los recuerdos y los más afortunados (a quienes envidio) algún juego de tablero para recordar aquellos momentos de la infancia con nuestros amigos.