Para nuestra entrada diaria quiero recordar con todos vosotros un coche que en su momento tuvo una gran aceptación, un coche que bebía directamente del estilo dejado por el modelo CX. Se trata del Citroën BX, un automóvil que tuvo un montón de versiones diferentes para satisfacer las exigencias de todo el mundo. ¿Cómo se publicitaba este coche? Así se hacía en la prensa escrita en 1988.

“Citroën le presenta una magnífica oportunidad para tener un Citroën BX, provisto de un potente motor y a un precio muy excepcional. La oportunidad se llama BX 16 RS. Su motor de 1.580cm³ desarrolla nada menos que 94 caballos de potencia, capaces de alcanzar los 176 kilómetros por hora de velocidad máxima y acelerar de 0 a 100 kilómetros por hora en tan sólo 12,4 segundos, caja de cambios de cinco velocidades y frenos de disco en las cuatro ruedas”.

Así era el Citroën BX de 1988

“El confort, la estabilidad y la fiabilidad del Citroën BX, en una nueva serie que destaca por su potencia. Es el BX 16 RS, un automóvil con el que se sentirá satisfecho y seguro. Su equipamiento incluye pre equipo de radio, embellecedores de gran diámetro en las ruedas, luneta trasera térmica, retrovisor exterior regulable desde el interior, y asiento abatible”.

“Además cuenta con aire acondicionado opcional y un pack a un precio más que interesante, compuesto por elevalunas eléctrico, cierre centralizado, lunas tintadas y cortinillas traseras. Citroën BX, la fuerza de la razón”.